miércoles, 12 de diciembre de 2012

Todo a pulmón

Artículo publicado en la revista Cadena del cuero (marzo de 2013).

Autogestión y economía social

Las cooperativas de calzado Püporé y CUC, revelan el crecimiento del sector de un importante método de producción social que se asoma como una alternativa laboral sustentable. ¿Qué son las cooperativas y cuáles son sus principios? Beneficios y controversias.

     La década de los noventa en la Argentina, signada por la orientación del papel del Estado en las doctrinas del neo-liberalismo que privilegiaron un régimen de privatizaciones de las empresas públicas, trajo como consecuencia un alto nivel de desindustrialización y desempleo a nivel nacional. Tras el estallido de la crisis en el año 2001, aunque con casos anteriores a esa fecha, los trabajadores comenzaron un proceso de reorganización de sus puestos de trabajo, en defensa de sus fuentes laborales y como respuesta al vaciamiento de las fábricas. En el proceso de recuperación de sus industrias y de organización democrática de cooperativas autogestionadas, la lucha y movilización planteada por los trabajadores fue logrando el avance de sus reivindicaciones.  

Dejando huellas”

Reyes Guerrero (derecha) - Foto: Paula Surraco.
     La cooperativa de trabajo Püporé es un emprendimiento textil y de producción de calzado del barrio de Laferrere, partido de La Matanza, especializada en la confección de prendas textiles como camperas, zapatos y borcegos. Nació en 2006 a partir de la iniciativa de un grupo de trabajadores que practicaban el oficio y decidieron unirse. “Somos 60 compañeros que desde hace casi siete años transmitimos los valores de la solidaridad para con los compañeros y la importancia de la igualdad de condiciones”, señala Reyes Guerrero, trabajador de la cooperativa desde sus comienzos.
     De esta manera, empezaron a organizarse incorporando la dinámica de la economía planificada y el trabajo en equipo sumando nuevos integrantes: generalmente jóvenes que desean introducirse en el rubro textil industrial. El primer paso consiste en desempeñarse seis meses como aspirante a socio y luego se decide su inclusión definitiva como miembro de la cooperativa.
     Sintetizando el espíritu de su iniciativa, Reyes Guerrero explica que “Püporé, en guaraní, significa 'dejando huellas'. Ese es nuestro compromiso moral y el de los principios de la cooperativa, ir sembrando buenas acciones. Dejar conocimiento de lo que puede hacer la gente para crear un mundo mejor”.
     Para lograr este desafío, Guerrero revela: “actualmente estamos capacitando a muchos chicos que se acercan a aprender sobre el oficio”. Y reconoce que el objetivo que se plantearon es “poder dar cursos de diseño de calzado e indumentaria. Queremos ofrecer un aprendizaje abierto al barrio, donde hay unas 1300 viviendas. Queremos apuntar a que los jóvenes aprendan sobre el oficio y que puedan salir al mercado”, analiza.
     Según el sitio oficial del Ministerio de Desarrollo Social, fue mediante el Plan Argentina Trabaja que Püporé recibió un subsidio para adquirir materia prima y ampliar la producción. Sin embargo, Reyes asegura que, si bien recibieron las subvenciones para la construcción de la fábrica, les siguen faltando capitales para tener stock de mercadería.
     La incidencia estatal plantea un cuestionamiento, en este caso, sobre una posible violación a los principios del cooperativismo: ¿Hasta dónde llega la autonomía y la independencia de estas fábricas? ¿El papel del Estado no altera el control democrático de los socios? En simultaneo, esta coyuntura evidencia una disputa por el criterio del otorgamiento subsidiario, denunciado por parte del arco opositor y varios movimientos políticos y sociales como un acto de corrupción y clientelismo (ver recuadro “Argentina no trabaja”).


Cooperativa Púporé.
Contacto: Reyes Guerrero (4698-2210)
                                                                                                                                                                                          

Cronología de una recuperación

CUC cuenta sólo con una línea productiva Foto: Daniela Castro
     La Cooperativa Unidos por el Calzado (CUC), es un ejemplo de fábrica recuperada por sus trabajadores, autogestionada por ellos desde el año 2003. Se encuentra en el Partido de General San Martín (identificado como el primer cordón industrial del conurbano bonaerense), en lo que era la “Planta 1” de la ex firma Gatic, una de las empresas productoras de calzado e indumentaria deportiva más importantes de todo el país. Llegó a tener más de veinte plantas de producción en las provincias de Buenos Aires, La Rioja, Córdoba y Corrientes, contabilizando alrededor de 7200 trabajadores en sus épocas de mayor actividad. Incluyendo calzado, indumentaria y accesorios, Gatic llegó a facturar 320 millones de dólares al año. Los trabajadores llegaron a vivir una cierta bonanza económica, que se fue perdiendo paulatinamente durante la década del noventa como consecuencia de la apertura indiscriminada del mercado local, la crisis económica del país en general, un endeudamiento feroz y errores de gestión cometidos por sus directivos.
     La gestación de la cooperativa pasó por varias etapas. En el año 2000, la familia Bakchellian cede la dirección de la empresa a otras personas y se retira, en un contexto en donde los trabajadores venían tolerando el atraso y reducción de sus salarios. Hacia fines de 2001, el nuevo directorio decide despedir a todos los empleados de Planta 1 y se llevan las máquinas a una sede ubicada en Pilar. Entonces los trabajadores (con la ayuda de familiares y vecinos) montan una carpa en la calle, frente a la fábrica, durante casi un año. Hacia mediados de 2002, ya constituidos en una cooperativa de trabajo, arman un plan de negocios con la idea de trocar su deuda salarial por máquinas y montar una fábrica en un predio que les sería cedido en José León Suárez.
     En ese momento vuelve a cambiar la conducción de Gatic. Se reabre Planta 1 y se toma a todos sus empleados otra vez. Sin embargo, comenzarían a sucederse una serie de dificultades, entre ellas la pérdida de la licencia Adidas. Hacia septiembre de 2003, los trabajadores ven demorarse los pagos nuevamente y, cansados de volver vivir la misma historia, un mes después deciden tomar la planta. Desde entonces, el cuerpo de trabajadores quedó compuesto por obreros de la ex Gatic y nuevos miembros: jóvenes que recibieron capacitaciones en los diferentes oficios que involucra a la planta y fueron incorporándose a la cooperativa.
     El momento de la autogestión productiva comenzó a partir de 2004, cuando el juez, que dejó el edificio, las máquinas e instalaciones bajo el cuidado de los trabajadores, los autorizó a producir. Unos meses después, lograron la expropiación por un período de cinco años, superando al fin la batalla legal.
Recuperar la dignidad 
Cuerpo de trabajadores de CUC - Foto: www.diazcortez.com.ar
     La cooperativa Unidos por el Calzado comienza con la toma de la fábrica por 260 ex-empleados; "hoy en día está conformada por 80 o 90 trabajadores", asevera Juan Carlos Gómez, socio de CUC. Desde hace casi un año, dejaron de disponer de una gran parte de sus máquinas que se encuentran fuera de servicio. Por ello, no están realizando capacitaciones ya que no consiguen las subvenciones necesarias para ampliar su maquinaria: "Estamos pidiendo los subsidios pero no hay respuesta", agrega Gómez. Cuentan con una sola línea de producción, en donde fabrican entre 200 y 250 pares de zapatillas por día; es decir que están muy por debajo de la capacidad productiva de la fábrica (llegaron a ser tres líneas).
     Desde su lanzamiento en el recuperado hotel Bauen, CUC tiene un fuerte vínculo con la comunidad de San Martín. Se decidió, mediante asamblea, mantener en funcionamiento un jardín maternal que brinda servicios a los asociados y vecinos de la localidad. Gómez cuenta que "el proyecto fue declarado de interés público por el Consejo Deliberante de la municipalidad". Además, se permitió la instalación de una radio comunitaria que se había quedado sin lugar físico para transmitir y la construcción de un centro cultural, en donde trabajan con menores que han tenido problemas penales. También se desarrolla un curso de aprendizaje de instrumentos de percusión como en otros momentos se dictaron talleres de baile y de idiomas.

Cooperativa Unidos por el Calzado (CUC)
Contacto: 4116-4693 (Juan Manuel Gómez)

                                                                                                                                  

Argentina no trabaja

     Sergio Bertaccini, integrante del Movimiento Territorial Liberación Rebelde, viene denunciando desde hace algunos años, junto a otras estructuras de base, las malversaciones del Estado con los fondos del Plan Argentina Trabaja: “El tema del clientelismo es parte de cómo está armado el programa. Está diseñado para las organizaciones que están con el gobierno nacional. Se ha implementado en algunos municipios y provincias de los gobernadores e intendentes que son afines al Frente para la Victoria (FpV), y eso es una forma de contención social.”, manifiesta.
     En la misma línea, certifica que “de los municipios que no cierran filas con el gobierno nacional, ninguno es beneficiario de este plan. Hubo mucha resistencia de los movimientos sociales y de la oposición. Este es el punto principal, los parámetros con los que se elige a los beneficiarios y el control que se hace sobre el manejo de recursos de los intendentes”. Según Bertaccini, “el que manejó todo en sus comienzos fue Sergio Berni, quien hoy es ministro de Seguridad, ex cara pintada, un tipo nefasto”, exclama.
     Además, explica que “cuando se planteó el ingreso de 1200 pesos era una suma más importante. Hoy eso es el equivalente a un Plan Jefes y Jefas de Hogar Desocupados, si lo comparás con el primer momento y el valor del dólar. Eso no le alcanza para sobrevivir a ninguna familia, es claramente asistencial”, afirma y amplía: “La denuncia corre tanto por el manejo de fondos de los intendentes como por el anexo a la planta de trabajo. Porque, de hecho, quienes dependen directamente del municipio son los que suplen a los trabajadores de planta. Y las cooperativas armadas por las organizaciones que tienen contratos de trabajo, que hacen tareas municipales, también son parte del entramado. Corresponde a la propaganda política que se hace alrededor del tema, generalmente antes de las elecciones”.


*Sergio Bertaccini (Movimiento Territorial Liberación Rebelde)*
Contacto: 15-5771-3018


Por Matías De Rose.